miércoles, 16 de noviembre de 2011

La política es un deporte

Cualquier deporte está compuesto de reglas que normalizan el desempeño del juego. Existen árbitros que supervisan el desarrollo de cada competidor y están para hacer cumplir los reglamentos, el respeto a estos últimos sirve para tener un ambiente claro y transparente en el transcurso de la competencia y así, los resultados que se den, sean justos e irrevocables.

Un deporte es emocionante, la adrenalina recorre el cuerpo de todos los actores implicados, desde los competidores y árbitros hasta los espectadores. La política es un deporte que en elecciones se vuelve extremo. Los partidos son los deportistas que se unen en equipos para ganar a uno o varios contrarios; el árbitro en nuestro país es el Instituto Electoral Federal;  y los espectadores somos los ciudadanos pero a diferencia de que nosotros tenemos participación en dicha competencia, somos los que con nuestro voto decidimos los resultados.

El pasado sábado 12 de noviembre el mexicano Juan Manuel Márquez boxeo en contra del filipino Pacquiao, pelea que duro 12 rounds en los cuales el mexicano, a los ojos del público, presentó ventajas sobre el filipino con mejores estrategias y un juego limpio, pero que quede claro que esto fue lo que las personas fueron percibiendo en el transcurso de la pelea; al finalizar los jueces le dieron el triunfo a Pacquiao. ¿Justicia o Injusticia?

Otra competencia se suscitó ese mismo fin de semana. Las elecciones de Michoacán para gobernador del Estado, competencia reñida. Recordamos un poco el estado anímico de Michoacán, estado colonial lleno de maravillas arquitectónicas y naturales, el cual en los últimos años se ha visto en medio de violentos sucesos pero que está en la mejor disposición de mejorar su condición.

Estas elecciones significaron para la gente michoacana un voto de esperanza, el público participó en el deporte más emocionante y peligroso de la política, fueron a votar por quien sus corazones y su razón les indicaba el partido que sería la mejor opción. Tres contrincantes fuertes: PRI, PAN y PRD ¿a cuál escoger?

La contienda no empezó ese 13 de noviembre, fue un juego maniobrado desde meses atrás, juego en el cual se iban perfilando los más fuertes, todos buscando ser los preferidos para el público así como reflejar su juego limpio ante los árbitros; comenzó la simpatía por cada uno de los jugadores, llevando a cabo sus estrategias para resultar victoriosos.

Al final de la competencia el ganador fue el PRI, para muchos el resultado fue justo a pesar de algunos hechos turbios en la contienda por parte de los contrincantes, como propaganda negativa y descalificadora hacia los oponentes, disturbios en casillas, incertidumbre en la gente por rumores de violencia, etc.

Cada aficionado va a defender a su equipo y va a sentirse victorioso incluso antes de terminar el juego o la pelea, pero los árbitros contaron los puntos que obtuvieron cada uno de ellos y dieron su veredicto. Quizás el sentir de muchos ciudadanos que votaron por el candidato perdedor es como el de la pelea entre Márquez y Pacquiao, un sentimiento de robo pero los resultados se dieron con base a las normas de los jueces.

En el caso de Michoacán, el instituto federal electoral da el fallo a favor del PRI y los ciudadanos o fanáticos en este contexto... Obtienen el dirigente por el cual votaron o no.

Tania Hernández

5 comentarios:

  1. Esta muy interesante la informacion, creo que siempre va a ganar el que tenga mas dinero o este mejor respaldado.

    ResponderEliminar
  2. No lo había visto de esa forma, pero concuerdo en que sí, se parece mucho a los deportes. En política siempre se corre el riesgo de pertenecer a las mayorías.

    Excelente comparación.

    ResponderEliminar
  3. Yo creo que el deporte y la política no deben mezclarse. La política no debe ser un deporte, ni un juego, nunca lo ha sido y no deberá de serlo jamás, ni en analogías fuera de lugar.

    ResponderEliminar
  4. En el caso del boxeador perdedor… es honorable de su parte reconocer su derrota aun cuando ésta pueda ser injusta por la decisión de los jueces. En ese caso, las personas no tienen más que estar inconformes ya que NO participan en la decisión pero sabemos que Gano el mexicano, no?. En el caso de Michoacán… la gente es quien reconoce al ganador, el IFE solo hace un servicio pagado por nosotros de contar los votos y el punto importante es que no tienes derecho a quejarte si no estás conforme con el partido ganador CUANDO NO VOTASTE. Tu credencial “electoral”, ósea “elección”, ósea tu poder para ELEGIR ergo tu derecho, no lo ejerciste. No formaste parte y eso es porque no quisiste.
    En el 2012 se elegirá el presidente de tu país y otros puestos gubernamentales… quieres elegirlos o no?
    Fernando Arroyo.

    ResponderEliminar
  5. Esta muy ineteresante demaciados sucesos estan pasando en el pais que bueno que lo veamos con un punto de vista positivomuy bueno!

    ResponderEliminar